13 abril 2019
Y mi profesor de gimnasia, muy en tono militar, sentenció: ¡Tienes que dar el salto por cojones! … y me rompí el brazo. Tenia 16 … hoy lo volvería a hacer.
Ya sabéis, lo dijo Camus: La estupidez insiste siempre.
“Y me permito hacerles un ruego: si en algún momento tropiezan con una historia, o con alguna de las criaturas que transmiten mi libros, por favor créanselos. Créanselos porque me las he inventado”. (Final del discurso de Ana María Matute al recibir el Premio Cervantes 2010)
Me encanta como has condensado en unas escasas palabras esa vivencia... Muy bueno, amigo
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias, Alfonso, viniendo de ti, todo un elogio.
EliminarUn abrazo de domingo la nuit
Jajajaja
ResponderEliminarTú te reirás, Tracy, pero a mi me dolió mucho ...
EliminarFeliz semana santa
Somos capaces de tropezar dos veces con el mismo salto, con el mismo tono militar.
ResponderEliminarUn genio, grande Camus, grande Enrique!
Abrazos!
Gracias Frodo, un abrazo muy fuerte.
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